Pues no sé si lo que coleccionas es viento u oxígeno, y tamoco si es verdad que el viento oxide porque tiene oxígeno, pero desde luego que fotografías fantásticas si que tienes y en tu colección.
...y la segunda foto es magnífica...esa coincidencia entre la nube y la orientación del viento-molino. Zen en estado puro, como maravillosas son las que veo abajo intentando apresar lo inapresable con esa camiseta de preso.
Joder, Andriu, a ver cómo coño hago yo estas fotos en medio de esta Sevilla cada vez más inhumana porque hay más "humanos". Envidia, malsana por supuesto, me das.
Sin falsa modestia he de decir que ocurre un poco como con la fórmula 1: lo que el piloto (fotógrafo) pone es bien poco.
La clave: el lugar idílico en el que vivo, así como hacer muchas fotos y seleccionar las mejores.
Y es que de fotografía no tengo conocimientos ni formación alguna; quizás sí cierta "intuición".
Y además (y esto sí que es característico de cualquier obra artística, salvando las distancias, claro) lo cierto es que la mitad del valor de estas fotos lo ponen quienes las ven e interpretan.
Por ejemplo, lo de la camisa de preso para apresar lo inaprensible no se me había ocurrido y es buenísimo. Así como en el efecto de la nube, en que no había reparado.
En lo de Sevilla no estoy de acuerdo. Las grandes ciudades (con su aglomeración de "humanos") están llenas de estímulos; también para el objetivo de una cámara.
Tú que eres experto en panópticos, en ver árboles y bosques, deberías de saberlo...
5 comentarios:
Pues no sé si lo que coleccionas es viento u oxígeno, y tamoco si es verdad que el viento oxide porque tiene oxígeno, pero desde luego que fotografías fantásticas si que tienes y en tu colección.
Saludos.
Muchas gracias, juanjo.
Ayuda tener una modelo insuperable: la playa de Famara, en Lanzarote.
A mí me oxidan las horas que paso en el insti. Luego, por fortuna, vuelvo a Famara, cada tarde-noche, y me oxigeno.
Un saludo.
...y la segunda foto es magnífica...esa coincidencia entre la nube y la orientación del viento-molino. Zen en estado puro, como maravillosas son las que veo abajo intentando apresar lo inapresable con esa camiseta de preso.
Joder, Andriu, a ver cómo coño hago yo estas fotos en medio de esta Sevilla cada vez más inhumana porque hay más "humanos". Envidia, malsana por supuesto, me das.
Gracias de nuevo.
Sin falsa modestia he de decir que ocurre un poco como con la fórmula 1: lo que el piloto (fotógrafo) pone es bien poco.
La clave: el lugar idílico en el que vivo, así como hacer muchas fotos y seleccionar las mejores.
Y es que de fotografía no tengo conocimientos ni formación alguna; quizás sí cierta "intuición".
Y además (y esto sí que es característico de cualquier obra artística, salvando las distancias, claro) lo cierto es que la mitad del valor de estas fotos lo ponen quienes las ven e interpretan.
Por ejemplo, lo de la camisa de preso para apresar lo inaprensible no se me había ocurrido y es buenísimo. Así como en el efecto de la nube, en que no había reparado.
En lo de Sevilla no estoy de acuerdo. Las grandes ciudades (con su aglomeración de "humanos") están llenas de estímulos; también para el objetivo de una cámara.
Tú que eres experto en panópticos, en ver árboles y bosques, deberías de saberlo...
Flipante...
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