domingo, 29 de junio de 2008

cAmBiOs SúBiToS


"Sí, no cambiamos apenas en cinco o incluso diez años y de pronto, en uno solo, nos hemos convertido en alguien distinto, en alguien de otra edad o con otra mirada ya irreversible."

(Javier Marías, EL PAÍS SEMANAL)

LeAnDrO PeRdOmO 1


"Hoy, siempre que puedo merodeo por los rincones costeros de esta isla mía natal, a veces con la caña a cuestas, a veces sin caña, pero con una gran ilusión de olas, y singladuras, y rumbos, y pleamares, y bajamares a cuestas. Yo, internado tierra adentro, necesito más que nada ver el mar, y ese es mi sino. ¡Ah ese sino de los hombres, de algunos hombres! ¡Oh Prometeo encadenado! y ¡oh imaginación, grandiosa imaginación salvadora de los hombres, de algunos hombres! Gracias a la imaginación muchas personas se salvan, unas de la locura, otras de la amargura, otras de la inutilidad total y de la chifladura. Hay quienes han llegado hasta imaginar a Dios, a imaginárselo quién es y cómo es. Es cuando la imaginación simple se convierte en imaginación creadora, que es lo mismo que salvadora."

(Arrecife. Antología de crónicas; by Leandro Perdomo)


miércoles, 25 de junio de 2008

domingo, 22 de junio de 2008

martes, 17 de junio de 2008

LaS AnTíPoDaS 2


¡Dilema insoluble!



En un comentario al post anterior me formula Montse una difícil pregunta:

"Si tuvieras que elegir ¿con cuál te quedas? Es verdad que lo bueno es poder tener ambas de vez en cuando, pero ¿con cuál te quedarías si hubiera que elegir sólo una?"

He necesitado un día para acabar contestándome algo parecido a lo de Bebo Valdés y el Cigala:

"Yo no puedo comprender cómo se pueden querer dos mujeres a la vez y no estar loco"

Pero así es, aunque esta vez no se trate de mujeres sino de lugares:

mAdRiD

y

fAmArA

No puedo, creo, elegir y quedarme con sólo una.

Porque Madrid fue mi emancipación tardía.

Fue compartir piso con mi hermano en el zulo oscuro, gélido y sin embargo inolvidable de la callecita Alburquerque.

Fue consolidar con él una sólida amistad y cancelar para siempre nuestros seis años de diferencia, que no de diferencias.

Madrid fueron siete meses de juventud loca y fáustica.

Siete meses de juergas, de fiestas psicodélicas, de botellones (en los preludios de la ley anti-botellón), de discos y de afters, de bar Moreno, de bacanal callejera, de 2 de Mayo, de Sala Sol, de Malasaña, de cañas en La Latina, de risas en el pisito de la calle Limón y en tantos otros que mezclo y combino; tal que el ron.

Siete meses de estudio entusiasta: de hacer esquemas y resumir libros y preparar fichas y asociar ideas y teorías y conceptos y corrientes filosóficas en bibliotecas -Conde Duque, Complutense, la UNED- o en calles, metros o cafés; meses de lecturas, de conferencias y de un curso de lujo con Muguerza y Carlos Gómez.

Madrid, o el móvil siempre con el sms de una nueva amante.

Madrid, o la posibilidad de ver muchos mundos en uno y vivir muchas vidas en una.

Madrid, o la cultura viva, latiendo en cada esquina.

Madrid, o el crisol humano huérfano de Historia; nueva Babilonia.

No puedo descartar Madrid.

Tampoco Famara.

Porque Famara fue mi refugio, mi recodo y mi retiro.

Fue mi destino de eremita.

Allí donde las horas y los dias y los meses se volvieron lentos, como si pretendieran salirse del tiempo y dimitir.

Allí donde la soledad me hizo explorarme por dentro.

Allí donde he pasado algo más de cinco años, pronto interrumpidos.

Cinco años en los que he sabido lo que es trabajar, y mucho. Cinco años como profesor y luego, también, como jefe de estudios. Cinco años aprendiendo este oficio en el que nunca se sabe lo suficiente.

Cinco años de amantes ocasionales; de cariño y de muy poco amor.

Cinco años de empezar de cero, de venirme solo, de forjar amistades, de adquirir rutinas de las que poder sentir nostalgia una vez acabado todo.

Llevo en Famara cinco años, expuesto a la belleza y al misterio.

Porque Famara es la tierra y el mar y el cielo en que los hombres callan.

Callan y observan y escuchan el mensaje insondable del Risco, de la luz y del salitre.

¡Cuántos pensamientos solitarios a la vera de Famara!

¡Cuántos viajes a lo desconocido, a lo más íntimo, propiciados por un paseo hacia San Juan o hacia el Rincón!

¡Cuánta introspección, cuánta alegría melancólica, cuánta esperanza difusa de felicidad, cuánto recuerdo triste de felicidad, cuánta exaltación súbita del ánimo, cuánta admiración y apego y celo al haber sucumbido al embrujo y misterio y belleza de Famara!

No, tampoco puedo descartar Famara.

No puedo quedarme sólo con Madrid ni sólo con Famara...

¿Será por eso que me voy a Tyler?




lunes, 16 de junio de 2008

LaS AnTíPoDaS 1


¡Qué shock!


Del trajín, del jolgorio, del escándalo.

Del bramido de motores, del bip-bip de los semáforos, del estruendo de los cláxones.

¡Qué shock!

Al sosiego, a la calma, al silencio.

Al silbido de la brisa, al run-run del oleaje, al quejido de gaviota.



¡Qué shock, en sólo unas horas, cambiar Madrid por Famara!



¡Qué shock pasar de una a otra!

Pasar del trasbordo de metro al cambio de duna.

Pasar del gran hormiguero a la soledad.

Pasar de miles de estímulos a una verdad simple.

Pasar del paso de cebra al caminar descalzo.

Pasar del cronometraje a la hora de menos.

Pasar de olores urbanos a oler todo el mar.

Hacer de vuelta el camino desde la cultura hasta la natura.

Viajar desde un futuro rico hasta un pasado bello.



¡Qué shock, qué cambio, qué desgarro!


viernes, 13 de junio de 2008

FoRtY yEaRs


Leyendo la mini biografía de Martin Luther King (Reverend King) me encuentro con esta cita sacada de un panfleto segregacionista:

"If we don´t stop helping these African flesh eaters, we will soon wake up and find Reverend King in the White House"

Han pasado desde entonces unos 40 años.

Me pregunto si son demasiados o demasiado pocos.

domingo, 8 de junio de 2008

pRiMeRaS pReGuNtAs



He recibido un e-mail informándome del colegio y el nivel educativo en el que, al menos de momento, tienen previsto destinarme.

Me han asignado 2º de primaria.

Espero que se mantenga pues me han dicho que las condiciones en la secundaria son bastante duras. En primaria se trabaja mucho pero no hay problemas de disciplina.

Aún así, impartir primaria es para mí un gran reto, algo absolutamente insólito, novedoso y ante lo cual me encuentro muy verde, o en pañales.


Es tan diferente a lo que llevo haciendo los últimos 6 años que casi me parece que voy a cambiar de profesión, como si fuera a dedicarme el curso que viene a curar enfermos, a recolectar mazorcas de maíz o a conducir un vagón de metro.

En cualquier caso, estoy seguro de que voy a aprender muchísimo, actividad por la que siento una especial debilidad.



En cuanto a la escuela, se llama Orr Elementary School y está situada en la zona negra de la ciudad.

Sí, aunque no lo he oído así, de forma tan explícita, sospecho que en Tyler todavía hay rémoras de la segregación racial propia de los Estados sureños.


Investigando un poco, he hallado estos porcentajes relativos a la clasificación racial del alumnado de mi escuela:

Breakdown by Ethnicity:

White: 6.4%

Black: 47,7%

Hispanic: 45.6%

American Indian/Alaska Native: 0.3%


Otro dato que encuentro a poner en relación con lo anterior es éste:


Economically Disadvantaged: 82.6%


En 1863 se consiguió abolir la esclavitud en Estados Unidos a través de la Proclamation of Emancipation, después de haber perdido la guerra civil los estados del sur, defensores de la esclavitud, es decir, antiabolicionistas.


No obstante, estos mismos Estados siguieron legislando a favor de la supremacía de los blancos a través de una serie de leyes, llamadas "Jim Crow", encaminadas a mantener un régimen de segregación racial. En un librito que me estoy leyendo acerca de la vida de Martin Luther King, encuentro:


"Jim Crow meant more than physical separation. Separate waiting rooms at bus stations, separate railroad cars, separate sections in movie theaters, separate schools and churches, separate restaurants and drinking fountains."

Como todo el mundo sabe, dicha segregación no estuvo exenta de violencia.

En 1954 la Corte Suprema de Estados Unidos aprobó que la segregación racial en las escuelas debía terminar: los niños y niñas blancos y los niños y niñas negros debían ir a las mismas escuelas.

La realidad, ya se sabe, va a veces por delante de las leyes, pero también en muchas otras ocasiones ocurre todo lo contrario. El mencionado librito dice al respecto:

"Many white people in the South were very angry about the Supreme Court´s decision. By the autumn of 1955 nothing had changed in Montgomery. Black children and white children still went to separate schools".

Me pregunto hasta qué punto todo esto pertenece a un episodio cancelado de la historia de USA.

Me pregunto si la segregación de facto persiste en la ciudad sureña de Tyler.

Me pregunto si ese 6.4% de alumnado blanco será sólo el porcentaje mínimo que necesitan para cumplir en el papel con tal o cual ley antisegregacionista.

Me pregunto si yo mismo pertenezco a esa minoría de blancos contratado para cumplir con esos porcentajes o cuotas que marcan las leyes laborales que combaten la discriminación racial.

Éstas y algunas otras son mis primeras preguntas...


nOsTaLgiA AnTiCiPaDa 3.c

sábado, 7 de junio de 2008

martes, 3 de junio de 2008