Efectivamente, el último ejercicio de agudeza visual era al mismo tiempo una despedida de las islas, del océano, de los baños en las aguas limpias y bravas del norte de Tenerife.
El sábado por la mañna fui a darme un baño tempranero a las piscinas de Bajamar, antes de la hora en que quedan abarrotadas.
El sábado por la mañna fui a darme un baño tempranero a las piscinas de Bajamar, antes de la hora en que quedan abarrotadas.
Y allí fotografié estas lapas gigantes de bronce.
De bronce para resistir el empuje del cuchillo veloz y voraz que pretende arrancarlas.
O para perdurar un poco más frente al desgaste infinito del agua.
Habrá que preguntárselo al artista en cuestión.
Y el domingo al Charco de la Laja.
A esto lo llamo yo un completo: como cuando vas a Peter y te pides hamburguesa, papas y perrito.
A esto lo llamo yo un completo: como cuando vas a Peter y te pides hamburguesa, papas y perrito.
Los burgados del Charco no son de bronce.
Compañeros de viaje: los libros.
En tierra, mar...
En tierra, mar...
...y aire.
Y por fin Madrid.
¿Qué por qué ando tan escueto?
No sé.
¿Qué por qué ando tan escueto?
No sé.
11 comentarios:
Suicidios ejemplares???
Mucha suerte, Andrés. Otra experiencia, otros momentos. Sé que los vas a exprimir bien como hiciste en Texas. Y no te preocupes que aquí te guardamos la isla en buen estado. Un abrazo.
No son necesarios más palabras. Suerte y un abrazo.
De puta madre es como te va a ir, ya verás. O eso espero.
Rbc
Yai, es sólo un libro, no te inquietes Mamá-polla (con perdón). Lo compré en el Faro contigo y Sergi.
Jane, muchas gracias: ¿en buen estado? ¿hay elecciones autonómicas?
Ricardo: gracias compañero.
Rbc: yo también, espero que funcione tu bola de cristal.
Un abrazo.
A veces no hacen falta muchas palabras para decir mucho. Quizá el andar escueto se debe a que estás intentando explicar con palabras algo que no es fácil explicar: las expectativas que tienes al iniciar una etapa llena de posibilidades.
Por fin Madrid, ¡vive! es lo único importante.
Un abrazo, Montse
Pues sí, Montse, creo que los tiros pueden ir por ahí. Aunque en realidad me remito a lo dicho: No sé.
Un abrazo.
Mamápolla???? Pero bueno!!!
¡¡¡Perdón!!!
¡Quise decir "Mamá-pato"!
Jajaja...
Ya percibía yo que algo fallaba.
Besitos, cua, cua.
Pues sí: de pequeñito me llamaban "Andrés el pez", je je.
Fuerte lapa buena pa echarle un mojo por encima!!!
Suerte nene, besos
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